Excelentísimo Señor Embajador Ricardo G. ROJAS concedió una entrevista por escrito para la revista ‘Latin American Journal’ de la AJALAC (Asociación Japonesa de América Latina y el Caribe) en su edición del otoño publicada en octubre de 2022. La transcripción integral de dicha entrevista es como sigue:
―Su Excelencia fue acreditado como Embajador en Japón en julio del año pasado. ¿Cuál es su impresión de Japón? ¿Cuáles son sus recuerdos más memorables de su estancia en Japón hasta ahora?
He tenido el honor de ser designado como Embajador de Chile en Japón el 2021 y, a poco más de un año de mi estadía en este país, puedo decir que es un lugar que me ha sorprendido muchísimo. Si bien, mi arribo ocurrió en la mitad de la pandemia, he podido descubrir parte de su territorio y aquello que hace único a Japón en el mundo.
Durante este tiempo he disfrutado de viajar por diversas zonas del país tales como Kyoto, Osaka, Hiroshima, Fukushima y Fukuoka, viendo los contrastes de este vasto y variado territorio que impresiona por el maravilloso contraste de sus templos ancestrales, la modernidad de ciudades y los medios de transporte.
―Chile es conocido como uno de los países más desarrollados de América Latina, como se demuestra su ingreso en la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) en 2010. ¿De qué se sienten orgullosos los chilenos en su país?
El ingreso de Chile a la OCDE ha permitido un diseño moderno de políticas públicas en diferentes áreas, así como validar y mejorar las existentes.
Así, a modo de ejemplo, en comercio internacional, se destaca la apertura de flujos de comercio e inversiones presentes en el país; la creación del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación; la gobernanza en el sistema de empresas públicas; el fortalecimiento de la institucionalidad ambiental, materializado a través del Ministerio del Medio Ambiente, el Servicio de Evaluación Ambiental y los tribunales ambientales, entre otros. En definitiva, todos estos aspectos fueron impulsados, profundizados o complementados a raíz de recomendaciones de la OCDE y en los cuales, por cierto, debemos seguir trabajando y perfeccionando.
―En su país, el Presidente Gabriel Boric asumió el poder como el presidente más joven de la historia (36 años) en marzo de este año, y está atrayendo la atención internacional como un nuevo tipo de presidente de izquierdas. ¿Qué puede decirnos sobre la personalidad del Presidente y las políticas económicas y sociales prioritarias?
Como lo ha indicado nuestra Ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola, el Presidente Boric representa un nuevo liderazgo de izquierdas en la región, el cual busca impulsar una agenda común más allá de las diferencias ideológicas entre sus gobernantes.
Con ello en la mira, el enfoque de este gobierno es construir una propuesta feminista, ecológica y poner a Chile en la agenda internacional. En este sentido, una de las primeras señales fue la adhesión de Chile al Acuerdo de Escazú, un tratado regional en materia ambiental. Otro ejemplo, es el inicio de gestiones para que Chile forme parte del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, conocido como Pacto de Marrakech.
-El 4 de septiembre se celebró un referéndum sobre el proyecto de la nueva Constitución, redactado por la Asamblea Constituyente tras un largo proceso. ¿Cuáles son los resultados y la percepción del público?
El proceso constituyente se inició en octubre de 2020, ocasión en que los ciudadanos se manifestaron por la opción “Apruebo” para redactar una nueva Constitución mediante una “Convención Constitucional”.
Posteriormente, de manera democrática, se eligió a los integrantes de dicha Convención en mayo de 2021. Los convencionales trabajaron durante un año en la redacción de un texto que fue propuesto al país. Así las cosas, el 4 de septiembre pasado se llevó a cabo el “plebiscito de salida” a través del cual los ciudadanos, tanto en Chile como en el exterior, pudieron manifestarse a favor o en contra de dicha propuesta constitucional la que, en definitiva, fue rechazada por el 61,8%.
En este contexto, debe destacarse el profundo compromiso de Chile para con la democracia y sus instituciones. La misma noche del plebiscito de salida, conocidos los resultados, el Presidente Gabriel Boric señaló que, si bien el proyecto de constitución propuesto fue rechazado, existe un mandato de la ciudadanía por cambios estructurales que demandan a nuestras instituciones y actores políticos a trabajar con más empeño, diálogo y respeto hasta arribar a una propuesta que sea representativa de todas y todos.
―Háblenos de la política exterior y comercial del Gobierno del presidente Boric. En particular, ¿cuáles son las relaciones con Estados Unidos y China, y con los gobiernos de izquierda de América Latina?
La política exterior de Chile es una política de Estado basada en una serie de lineamientos fundamentales y principios que sustentan las decisiones que se toman en materias de relaciones exteriores, como son el respeto al derecho internacional y la Promoción de la democracia y el respeto a los derechos humanos, entre otros.
Ahora bien, el gobierno del Presidente Gabriel Boric ha enfatizado la Política Exterior Turquesa, que contempla una serie de objetivos y prioridades que contribuyan al posicionamiento de Chile como un actor relevante en la mitigación del cambio climático, la protección del océano y los ecosistemas con especial énfasis en avanzar hacia un modelo de desarrollo más sostenible.
Esta iniciativa surge como respuesta a los desafíos que presenta la acelerada crisis climática, que considera la creciente pérdida de biodiversidad y aumento de la contaminación, problemáticas que requieren de acciones concertadas entre los países, especialmente en nuestro continente.
―¿Qué opina de las relaciones bilaterales entre Japón y Chile? ¿Hay algún ámbito en el que las relaciones puedan ampliarse en el futuro?
Este año 2022, Chile y Japón conmemoran 125 años de relaciones diplomáticas, las cuales se iniciaron con la firma del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación en 1897.
Hoy contamos con numerosos acuerdos que abarcan diferentes áreas, como son la cooperación en la reducción de desastres naturales, donde se destaca el proyecto “Kizuna” -llevado a cabo entre nuestras agencias de cooperación, AGCID y JICA- que puso a Chile como centro de perfeccionamiento de capacidades y formación de especialistas en estas materias en Latinoamérica; el Acuerdo Working Holidays, que ha permitido que jóvenes de ambos países puedan vivir la experiencia de adentrarse en nuestras culturas; la cooperación tecnológica, que ha facilitado el intercambio de expertos y buenas prácticas en áreas tales como la prevención de la marea roja con el Science and Technology Research Partnership for Sustainable Development Program (SATREPS); entre muchas otras.
Hacia el futuro, pretendemos continuar la profundización y diversificación de nuestra relación bilateral, particularmente en áreas como el hidrógeno verde y el despliegue de redes 5G. Como se puede apreciar, este diverso vínculo evoca raíces profundas y valores compartidos, en base a los cuales nuestros países construyeron una sólida relación de amistad, basada en el respeto y la cooperación.
―¿Cuáles son los esfuerzos particulares del Embajador para fortalecer las relaciones bilaterales?
Actualmente, se está trabajando en una serie de posibles visitas de autoridades para poder profundizar y avanzar en todas las áreas que son de interés mutuo. Pese a las dificultades que la pandemia del COVID-19 impone, creemos que la interacción personal siempre es importante para poder conocernos y discutir francamente las diferentes alternativas para alcanzar avances y acuerdos concretos.
Asimismo, esperamos poder colaborar con las diferentes iniciativas en materias como intercambios académicos y estudiantes, culturales, económico-comerciales, prevención de desastres naturales, ciencia y tecnología.
―¿Tiene algún mensaje para los lectores de esta revista?
Quisiera aprovechar esta oportunidad para agradecer a la Asociación Japonesa de América Latina y el Caribe y, especialmente, al “Latin American Journal” por su interés por conocer Chile y nuestra región. Creo firmemente que estas instancias contribuyen a descubrirnos y comprendernos de mejor manera, elementos que son esenciales para encontrar puntos en común y avanzar conjuntamente hacia un futuro mejor para nuestras sociedades.
FIN